Los tonos vibrantes de naranja, rojo, amarillo y rosa hacen que esta flor comestible sea una adición llamativa a cualquier plato dulce o salado. Un tallo y flor de celosia se pueden usar encima de guisos, sopas, mariscos, sándwiches especiales, bandejas de verduras, postres y platos de frutas frescas. Las flores comestibles de celosia también se pueden servir como plato acompañante con carne o pescado. Pruébalas como snack, mézclalas en aderezos o smoothies, o cocina ligeramente con especias. La increíble forma y color del tallo de la celosia son una gran adición a cócteles y mocktails como adorno o mezclador. Además, las flores comestibles frescas son una decoración popular para todo tipo de pasteles y repostería.